jueves, 23 de junio de 2011

Almas Necias

Almas Necias

Almas necias que piensan que su poder puede volver esclavos a las almas mas libres.
Almas necias que suponen que su exterior puede hacerlos brillar frente a los ojos de la sabiduría.
Almas necias que creen que sus conocimientos les dan la capacidad para criticar a las almas puras, a las que no conocen.
Almas necias que advierten que sus riquezas pueden comprar el alma valiente de aquel que se entrega a sus pasiones sin temor a las adversidades.
Almas necias que no se dan tiempo para corregir sus errores, que viven su vida a expensas de otras.
Almas necias abramos los ojos y volvámonos almas libres.

lunes, 6 de junio de 2011

Batallas

Encerrado entre cuatro paredes, asi es como me encuentro, enclaustrado en mi afán de perseguir algo que ni yo mismo comprendo, no se a donde me ha de llevar pero puedo sentirlo.
Escucho mil voces todas ellas con una individualidad muy tenaz, algo acosadora pero a la vez despertando curiosidad, todas ellas me gritan algo, piden la resolución de sus vidas.
No puedo con ellas, es una batalla en la cual casi nunca hay vencedor, una que podría durar toda la eternidad si no fuera por la iluminación del pensamiento, esa maravillosa acción que elimina a algunas de ellas, solo tengo algo en claro todas ellas son uno y yo... yo soy todos ellas.

miércoles, 1 de junio de 2011

ojos verdes

A veces sueño con lo que nunca pudo haber sido, como el cuadro de VanGogh, una noche estrellada. A veces pienso en tus tristes ojos, verdes, secos y deliciosos, pienso en cuanto me gustaba verlos mirándome, dibujándome el rostro, decorando mi alma. Pienso en los secretos que escondías, esos que nunca me dejaste conocer. Recuerdo tu tímida sonrisa que asomaba un signo de felicidad cada vez que te tocaba. Pienso un poco en ti y en lo que pudo haber sido.

Y de repente paro, porque no quiero imaginarme ni acobijarme, te convierto en deseo y empiezo a soñarte, entre ruinas y rosas, pedestales y bicicletas, todas las calles se derraman de ti, de esa intrigante esencia, tu carácter de niño, tus berrinches hipócritas. Oh eres un dolor de cabeza.

Porque al pensarte me incendio y me comienzo a extinguir, siendo testigo de todos mis lúgubres pecados, no tienen fin. Mis manos sudando, mi corazón palpitando, mi cuerpo expirando.

Y para calmar esta angustia he inventado 60 historias de amor, más de la mitad terminas conmigo. He explorado otros ojos, no tan bellos como los tuyos, pero azules como mis sillas,he sustituido tu voz por dos grabadoras que cantan folk. Me he mordido las uñas, he probado cocktails, me he cepillado el cabello, para olvidarme de que te quiero, para alejarme de los fantasmas, para convencerme de que fuiste real, de que si estuviste conmigo, pero estando en este hospital ¿Qué puede ser cierto?

relatos de un solo color

Quisiera ser un copo de nieve, pequeño, inútil y congelado; para así no tener que sentir esta ardiente y dolorosa amargura, que corre por mi cuerpo y descalcifica mis huesos. Que arde por dentro que derrite mi cordura.

Quisiera ser alegre primavera para así no tener que soportar esta tristeza que los hombres han creado por sus días de codicia. Cantar con los arboles y arrullarme en el viento, disfrutar de la brisa, el sol en el oeste, la cálida tierra renaciente.

Quisiera ser una canción pop que se repite una otra vez con un final feliz, tan absurda y resonante que se queda olvidada, quisiera olvidarme de mis monstruos morados y aterradores, que me jalan cual títere cada vez que les place, que se mente en mi meten y tartamudean miedos, que me hacen tan pequeña, oh tan pequeña que no quiero salir.

Quisiera ser libro para cargar sabiduría, porque la vida se me va y aun no aprendo nada, o aun no entendido de que se trata esto. Quisiera ser libro y que cada alma me tomara con la yema de sus dedos, sintiera mi textura delgada y amistosa, leyera mis encantos, apreciara la belleza de mis letras negras y acomodadas.

Quisiera ser su voz, acampanada, melodiosa, sublime, para así poder comunicar sus pensares y cuestiones, sus canciones abrasantes que te dejan sin aliento, darle valor en el escenario y entre sus sueños. Convertirme en nota, silaba, acento.

Quisiera eso o nada, mas no puedo huir de esta realidad tajante, de mi cuerpo volátil, de mi espíritu arrugado, de este frio y estos miedos, que me hacen cubo, cuadrado y vanidoso.

Pero hoy solo me queda sentir el viento tocando mi cara, secando mis lagrimas, susurrándome preguntas que no han tenido respuestas, haciendo eco entre mi cabeza, resonando y escapándose, de una u otra forma como espirales libertinos, como dulce boca retorcida, a lado de mis paredes siento la nada y nos vemos cara a cara.